En el mercado mexicano apenas comienza la conversación sobre Liquid Cooling, pero en SGR no lo vemos como un tema de futuro: lo vemos como una realidad que ya implementamos.
Fuimos los primeros en integrar esta tecnología en centros de datos en México, demostrando que no es un experimento ni una promesa, sino una solución que hoy permite a nuestros clientes operar cargas de IA, HPC y alta densidad de manera confiable y eficiente.

El Liquid Cooling es una tecnología de enfriamiento que utiliza fluidos como medio principal de transferencia térmica, en lugar del aire.
Las nuevas cargas computacionales alcanzan densidades imposibles de controlar con aire.
El Liquid Cooling reduce el consumo eléctrico y optimiza el PUE.
Permite aumentar la capacidad de un data center sin necesidad de ampliar espacio físico.
Disminuye la huella de carbono y contribuye a objetivos ambientales globales.
Mejora la estabilidad térmica y alarga la vida útil de los equipos.
En México, muchos data centers aún dependen exclusivamente del aire, pero el panorama está cambiando.
No todos saben cómo, en SGR ya lo hicimos.
Hoy, en México, pocos hablan de Liquid Cooling y aún menos saben implementarlo.
Sí, esta tecnología puede aplicarse en distintos niveles: desde gabinetes de mediana densidad hasta racks completos en entornos de misión crítica. La clave está en saber diseñarlo e integrarlo, y en eso SGR abrió camino como pionero en el país.

La industria no se pregunta si migrar a Liquid Cooling, sino quién lo puede hacer.
Cada proyecto requiere un enfoque distinto. En SGR integramos las principales arquitecturas de Liquid Cooling disponibles en el mundo, adaptándolas a las necesidades de densidad, eficiencia y escalabilidad de cada cliente.

Conduce el líquido directamente a los procesadores y GPUs mediante bloques de enfriamiento. Ideal para IA y HPC, soporta varios kW por chip con gran estabilidad.

Puertas traseras con intercambiadores de calor líquido-aire. Pueden manejar racks de 30–50 kW, lo que facilita migrar desde sistemas tradicionales.

Servidores completos sumergidos en fluidos dieléctricos, eliminando ventiladores y permitiendo racks de 80–100 kW o más. Es la arquitectura más disruptiva y eficiente.
Comparativa: Aire vs Liquid Cooling
- Eficiencia limitada en altas densidades.
- Mayor consumo energético.
- Mayor espacio físico.
- Vida útil reducida por estrés térmico.
- Soporta cargas de IA y HPC.
- Reducción del PUE y consumo eléctrico.
- Más densidad en menos espacio.
- Menor huella de carbono y más confiabilidad.